La confianza hay que saberla poseer, porque cuando no sabemos, lo que es confianza, ésta nos desvía, ocasionándonos un mundo de problemas, que ella misma ha fomentado en el camino a seguir cada día.
En los tiempos del Rey David, había una suplantación de la confianza por cosas y objetos que le hacían creer a la gente, que eso era Dios.
Nos podemos dar cuenta que hoy en día, sucede lo mismo, porque la gente cree y confía en el hombre, y se gloría de su tecnología, de sus carros, de sus caballos, y se deja a un lado la cultura de Dios, que es tan importante porque ella nos señala que la ciencia, las tecnologías y los bienes del cosmos, vienen del ingenio de su mano, siendo el hombre, el encargado de transformar el mundo, quien debe reconocer que la confianza, debe tener un canal que le está mostrando la belleza, el encanto y la gloria de este mundo.
Los canales de ciencia que tiene la tierra, están señalando que debemos tener confianza en la sabiduría del caballo, que debemos conocer la novedad de autos de última gama que han sido creados con el fin de que el hombre, mejore las distancias.
No es que Jehová esté en contra de las obras del hombre, sino que nos invita a que confiemos en las obras de sus manos, no dejando de contemplar, los secretos que tiene el mundo que nos rodea.
La Internet juega un papel muy importante, porque nos muestra la profundidad de los cielos y la magnitud de los mares, y el treinta por ciento de lo que llamamos tierra, estará delante de los ojos de los inteligentes, que confían en la inteligencia de este extraordinario cielo.
El salmista y Rey David, en su salmo 20: 7, nos dice así: "Estos confían en carros, y aquellos en caballos; Más nosotros del hombre de Jehová nuestro Dios tendremos memoria" Versión Reina Valera 1960.
Hoy podríamos decir que las personas confían en sus doctrinas y creen que éste es el refugio de su confianza. Sin embargo, en otro salmo el Rey David, dice que Jehová es el Dios en quien confía.
Los conflictos y los malos entendidos hacen que el ser humano, se divida, colocando la confianza en cosas de la naturaleza, que no pueden responder y que son cosas que la mano de Dios, ha creado para nuestro beneficio.
Nuestra confianza debe estar alimentada por el conocimiento de la naturaleza, que nos enseña una confianza y unos valores que capacitan y que instruyen al hombre, para que su confianza no lo desvíe de una adoración, que le permita la licencia para explorar este mundo que está sumido en una confianza puesta en las posesiones materiales.
La confianza mal instruida hecha a perder la paz, echa a perder el conocimiento, destruye las luces de sabiduría natural, que tiene el mundo para alumbrar la senda del inteligente. Para que el hombre tenga memoria de un mundo que Dios ha encendido con su luz y con su ciencia, necesitamos que nuestra confianza se ilumine con esta luz natural que alumbra al mundo.
"La cultura del hombre, será lograda a través de los medios que posee la tierra"
F P
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