LA HORA DE LA RECREACIÓN

En el mundo de la ornitología occidental, hallamos comportamientos en las aves, que nos permiten apreciar cómo ellas, le ponen color a la vivencia, con sus hijos.  Y el color que se imparte, es un color familiar que se da después de los protocolos del amanecer en la cultura del copete rojo Hacaritama.

Estas aves que son tan atractivas por su color y que la pueden apreciar ciudadanos de todo el mundo que visitan nuestra ciudad, podrán encontrar un ave que juguetea, poniéndole color a la recreación con sus hijos.

Aunque sus crías, aún no tienen el color, ellos sus padres, empiezan, digamos en un proceso donde el macho adolescente, por la influencia y el buen trato de su padre, comenzará su transformación de color tierra en su plumaje, al rojo dulce y atractivo. Y a la hembra se le manifiestan estos colores, en tonos más difusos. 

La cultura del copete rojo, es una cultura que llama la atención a la ornitología del globo del jardín, debido a que en sus vivencias en esta ciudad, va observando él, cómo sus hijos de una forma muy natural a la luz de cada sol y gota de agua, que cae en esta plaza 29 de mayo, de la ciudad de Ocaña, Norte de Santander, sus hijos comienzan a comprender que no solamente su padre, ha hecho énfasis en la responsabilidad familiar, y ellos con la educación y la inteligencia, que tienen las aves en este jardín del Catatumbo, se percatan de que han recibido las atenciones de unos padres responsables desde todos los puntos de vista, físicos, sociales y morales.

Pero que deben reconocer el color que les han transmitido sus padres, que ha sido uno de los asuntos recalcantes, y además han observado estas crías de principios del mes de julio, donde las lluvias en la ciudad Hacaritama, han caído reguladas, que el vestido de sus padres, en ningún momento, por causas de la lluvia y el lodo, se hallan presentado algún día a la hora de la recreación, con sus vestidos sucios o sus plumas embarradas.

Esto ha hecho que el color y la cultura de estas aves, se transmitan al mismo tiempo, pero estos padres deben tener un poco de paciencia, para que la cultura de este color carmesí, pueda entrar a través de la sangre en sus sistemas y producir la magia que empieza a cambiar sus plumas.

Y entonces, los padres, podrán ver una transformación en todos los comportamientos de sus hijos, que tienen la elegancia de un color autóctono que se ha transmitido en el valle de los Hacaritamas. Las aves siguen siendo un tesoro que muchos piratas, realmente no se percataron que existían en nuestra cultura occidental.

Sin embargo, nosotros quienes somos los depositarios de estos tesoros, continuamos compartiendo en este caso, la cultura de estas aves, que hemos llamado el copete rojo Hacaritama, como alternativa de perseverancia y logros que son tan importantes no solamente para los padres que se acojan a la amnistía de este conocimiento que con responsabilidad, sociabilidad y perseverancia, lograrán los padres del jardín global en su nido de amor, no solamente mantener los polluelos humanos, abastecidos de alimentos, salud, amor y las demás necesidades que se van presentando a medida que el color de la ciencia, se vaya impartiendo a través de la comunión.

Esta reflexión está basada en la siguiente cita que a la letra dice así: "Y en efecto, pregunta ahora a las bestias, y ellas te enseñarán; A las aves de los cielos, y ellas te lo mostrarán" (Job 12: 7) versión Reina Valera 1960.

"Sabiduría e inteligencia tiene el copete rojo Hacaritama, y ésta transmite a su descendencia, su color" 

F P