Las hormigas llamadas sabias, por el Rey Salomón, tal vez durante el atardecer o por la noche, llegaron hasta el borde del patio de mi casa. El día amaneció diferente porque las lluvias han menguado un poco, aquí en mi territorio y en el centro del país.
Estas hormigas, me han atraído la atención, por una simple razón, ya que tienen dos reinas, y tienen un ejército aproximadamente de unas tresciento sesenta hormigas, que son las que protegen a estas reinas, y las defienden hasta morir, si así fuese necesario.
Resulta que en la Biblia, hay una historia muy parecida a la de estas hormigas. Y es cuando el Rey de Israel, va a pelear con los ejércitos de Babilonia, y el Rey de Judá, le acompaña.
Se preparó todo para ir a dicho enfrentamiento. El Rey de Babilonia, le da instrucciones certeras a sus soldados y comandantes de quién es el que debe morir, en esa batalla; y les aclara que no debe morir ningún soldado en este campo de batalla, porque solamente el que debe morir, es el rey de Israel, únicamente.
Esto muestra que en asuntos de guerra, Babilonia, tenía un conocimiento muy definido, y en el ataque, moría únicamente el culpable. La batalla se llevó a cabo y por una flecha lanzada al azar, hirió al Rey de Israel, y este murió en el atardecer.
Podemos analizar en esta historia que las hormigas que nos visitan, logran formar un ejército que resuelve los obstáculos de la noche, y que se prepara para lo de este día, que está asegurado por su inteligencia, que en cuanto a consejo, tiene dos alternativas.
Este comportamiento lo podríamos aplicar al género humano. Hoy queremos dejar claro que las alternativas a seguir son: la sabiduría, la ciencia y la literatura, que convierten al hombre en un ser que razona, en el engranaje de las culturas y ciencias que tiene la tierra.
Las dos reinas, podríamos decir, que es el consejo que nos ha regalado nuestra madre, y nuestra esposa, quien ha hecho parte por el vínculo matrimonial, de una sociedad que supera a las tresciento sesenta hormigas soldado, y que se pone al frente de la humanidad que ha puesto los ojos en otras cosas, menos en estudiar la razón y los fundamentos de la unidad, el respeto y el aprecio por los siete mil millones y pico, de seres humanos que formamos parte del gran ejército, cuya cultura, sabiduría y ciencia dependen del conocimiento de la tierra.
".....Mira sus caminos, y sé sabio; " ( Proverbios 6: 6)
"La Psicología busca bases o fundamentos naturales, pero la ciencia, es el antídoto que mejora el sistema del pensamiento"
F P
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