LOS INDOCTOS

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El apóstol Santiago, estudioso en filosofía y humanidades, advierte a las culturas cristianas, y demás, que no se crean o se hagan maestros.  Aquí surge una pregunta que podríamos analizar.  Y es en sí, ese no.  Porque resulta que en la época de Santiago, toda aquella gente que asistía a las congregaciones, y tal vez con unos meses de participar del conocimiento, de la sabiduría y la filosofía, ya se proclamaban maestros.

Y esto empieza a perjudicar, digamos en sí, a las culturas que van a recibir un mensaje o instrucción, distorsionado.  Pero todo tenía una razón, y era: ganarse la vida, supuestamente con un mensaje que no tenía los fundamentos y principios del amor.

Algunos de ellos, creaban doctrinas a su acomodo.  Es decir, sustentaban su escaso conocimiento y esto lo tomaban  los grupos, que aún no conocían cuál era el conocimiento acerca de Dios y la sabiduría.  Estos maestros, de los cuales, muchos eran indoctos, llegaron a creer que la instrucción o la educación, no era necesaria.

Y esto es lo que multiplica en sí las ganancias deshonestas, que incluso la Biblia, en el marco legal de sus letras, enfatiza y advierte que con tales maestros, ni a comer o a cenar.  Este estudioso en humanidades y filosofía, reprende o exhorta mejor a dichas personas, que fomentan la confusión y el enfrentamiento con la iglesia oficial, que tiene que soportar dichos alumnos de maestros, que están lejos de la sociabilidad, del bienestar de los demás, de la salud mental, y de la paz colectiva.

Santiago, les dice a todos estos maestros e incluso a algunos pastores que se proclamaron a sí mismos como instructores, y fomentaron  la discordia, que tendrán mayor condenación.  En realidad ¿cuál es la condenación? es otra pregunta que debemos resolver en este blog.

La condenación, consiste en que no hay fundamento, y donde no hay fundamento, los principios de la verdadera educación para la iglesia y el cosmos, la convierten estos maestros y pastores, y quienes los siguieron, en un infierno de problemas.

Porque no tenían el conocimiento académico y el respaldo de la instrucción, en aquel entonces de Jerusalén.  Donde era el epicentro que podría estar al tanto de los pastores y maestros, que estuviesen calificados para esta obra que realmente, la iglesia necesitaba y merecía una instrucción superior.

Este asunto nos lo declara el apóstol Santiago, en la siguiente declaración que a la letra dice así: "Hermanos míos, no os hagáis maestros muchos de vosotros, sabiendo que recibiremos mayor condenación" (Santiago 3: 1) versión Reina Valera 1960.

Parece según el texto que al apóstol Santiago, como maestro, varias veces los indoctos que querían seguir confundiendo a la humanidad, le critican su maestría.  Por esta razón, él se incluye al manifestar: "que recibiremos mayor condenación"

Pero la sabiduría, la cultura y la ciencia, colocan los dispositivos del raciocinio, allí, para aclarar que él hace esto, porque es una persona que entiende muy bien, el asunto de humanidades, en segundo lugar, que él no quiere entrar en conflictos, simplemente diciendo que los condenados, son los demás o sea los que los estaban escuchando, y podríamos decir en tercer lugar, que Santiago, muestra su preparación sencillamente, porque no condena a los demás.

Es decir no juzga a sus semejantes y prefiere juzgarse él, que es lo correcto en este caso filosófico, que proceder desde los púlpitos y templos del globo, a enjuiciar a los demás.  Aquí hay sabiduría, cultura, ciencia y sociología.

Los invito a visitar este video que se titula: Muerte de Esteban en Español, de una duración de: 8: 12, cuyo enlace es: https://www.youtube.com/watch?v=q7KWXbp8wMQ

"Las discusiones teológicas, dice Jehová, han dividido a la familia.  Más la ciencia y la inteligencia, recuperarán la paz del globo"