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La academia del maestro Jesús, cada día, le enseñaba a sus estudiantes, en sus diversas formas y expresiones, que se deben observar con mucha tranquilidad. Igualmente que el conocimiento académico, donde cada estudiante debe entender la expresión, o la razón de dicha clase.
Una de las cosas a las que estaban acostumbrados culturalmente, las personas que rodeaban a este docente, era el creer en los tropiezos. Y creer que esto los preparaba para la vida. Algunos se habían rebelado contra los cultos, donde se practicaba por tradición, el sacrificio.
Y ya no querían escuchar más tal ideología. Sin embargo, ellos continuaban creyendo en un innumerable sistema de cosas que los llevaba a la misma conclusión, o diríamos a tener una vida semejante.
Entonces el filósofo Jesús, aunque ya no iba al templo, porque en este caso es el primero que se rebela contra el culto tradicional de los judíos, conforma una unidad de doce hombres más los que vinieron de otras partes, en aquel entonces a su academia.
Y muchas personas más que cada día, le seguían, en algunas partes dicen los evangelios, que era una multitud. Así que este maestro continúa con problemas cada día, desde diversos ángulos, aunque tratase de huir de los sistemas, que enseñaban sin tanta complicación, y aferramiento, las cosas de Dios.
Así que la academia de Jesús, por lógica el primero en tener más tropiezos en el día, era él. Porque no es nada fácil o regalado, instruir digamos un número de cien personas, con las cuales no haya que refutarlos en sus ideas o indisciplina para re educarlos.
Y este es el epicentro del tropiezo. No tenía una vida dulce y llena de paz, debido a que la mejor opción, consistía en dejar que el sistema judío, tratara estos casos con diferente maquinaria, digamos y lugares y templos con personas especializadas, que tenían su tiempo, según la misma teología, para enseñar, para descansar y para reflexionar.
Más el filósofo Jesús, según los análisis a los evangelios, tenía que estar todo el tiempo, trabajando. Debido a que así lo exigía su academia, y su público extra que cada vez era más numeroso. Los discípulos, eran los doce tropiezos principales.
Él les dice estas palabras: "Dijo Jesús a sus discípulos: Imposible es que no vengan tropiezos; mas ¡ay de aquel por quien vienen!" (San Lucas 17: 1) versión Reina Valera 1960.
He conocido desde niño, muchas personas que rodeaban nuestros hogares en Otaré y en otras partes del jardín, donde todo ha sido muy natural, y nunca se hizo énfasis en la cultura de tropezar. Sin embargo, todas estas personas en si, son cristianas, y aún están con nosotros.
Sin embargo, el líder Jesús de Nazareth, enfatiza el tropiezo en sus evangelios, debido a las creencias que eran propias de la doctrina. Pero a la realidad, debe re educarse el cristianismo en el globo, para dejar de creer que el diablo acecha al cristiano, como los depredadores a su presa, que es de donde viene la filosofía de que es imposible, de que usted viva una vida, sin problemas, sin obstáculos.
Entonces la teología de Jesús, trae la levadura del tropiezo sin percatarse los estudiantes, es que él vivía en ese mundo, donde hay que estar cada día solucionando problemas, mientras los otros están en camino.
Así de esa forma es imposible, vivir una atmósfera fresca, tranquila y que se parezca un poco a la de nuestro cielo con sabiduría y tecnología del globo. Es lógico que se puede compartir, instruir a los demás o a una congregación, donde haya que dar razón de estos conocimientos, pero todo bajo la cultura y el orden científico, que no atente principalmente contra la salud psíquica y mental.
Y que sea de vida para vida, de lo contrario ningún maestro, pastor o instructor, estará edificando su propia atmósfera positiva, ni su salud le va a responder en pocos días, más adelante. La teología se debe tomar no desde la cultura del tropiezo, porque todo lo resuelve, la ciencia y el conocimiento en la sabiduría de nuestro Creador.
Así que en este mundo, debemos entender que no hay nada imposible, sino que todo nos es posible, en cuanto tengamos en cuenta las leyes de cultura, físicas y estamentos científicos culturales que rigen al mundo. Cuando esto se tenga en cuenta, el género humano, va a tener tiempo para todo, y le será agradable instruir al que requiera conocimiento teológico, de buena manera, porque su influencia es tan positiva como la aurora al amanecer, en la naturaleza.
Los invito a visitar este video que se titula: ENRIQUE POLO. EL TROPIEZO, de una duración de: 5: 14, cuyo enlace es: https://www.youtube.com/watch?v=UCD1h2YJh4w
"Los tropiezos del sabio, se descontinuarán, como los rayos del sol, sobre los témpanos del hielo humano no pensante"
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