En la parte artística cultural y social, se necesita que el estudiante enfoque su oído a estos temas que son de trascendencia universal, y que llevan a la mente del hombre y a su psicología, a una transformación increíble.
Ninguno podría medir el desarrollo muy fácilmente de aquellos que se inclinan por una doctrina que enfatice los sonidos y las expresiones del mundo universal, y al mismo tiempo, pueda participar de esa filarmónica humana, que siempre está muy cerca de nosotros.
En este caso el científico y filósofo San Juan enfatiza una expresión muy corta, pero con un sentido que debe apreciar todo aquel que busca desarrollar, las facultades del oído. Cuando el ser humano, se detiene a contemplar la naturaleza, y observamos lo que son los ciervos y sus diferentes especies, nos percatamos que éste al menor ruido, enseguida enfoca su oreja hacia la dirección de donde proviene.
Esto indica que el ser humano, debe tener un oído tan despierto sus sistemas que apunten hacia la dirección exacta donde se produce el sonido. Y que debe tenerlo bien afinado, porque de lo contrario, allí perece, o no alcanza a llegar a su desarrollo debido a que no se interesó en el desarrollo de este sentido.
De igual manera, la psicología lleva al hombre a que enfoque exactamente el menor ruido en la voz o movimiento del mundo que está con nosotros, y que nosotros hacemos parte de él. Si alguno tiene oído, es de lógico que es para oír, porque hay seres humanos que no oyen, aunque se les gritase.
Otros es porque sus sistemas están congestionados por tanta grasa y entonces no responden al ruido o al vocerío, que les rodea. Es necesario que al apocalipsis se le de un tono, hablando figurativamente, que pueda sonar como una guitarra bien afinada, o una armónica, por ilustrar este tema.
Donde el instrumento le es un medio a la psicología para desarrollar los diferentes sonidos que estos instrumentos, enfatizan. Hay muchas personas, sobre todo los niños que se ilusionan con el sonido de la armónica y la guitarra, pero resulta que esto no es asunto de ilusión, es de perseverancia para un músico poder desarrollar las notas precisas, debe entrar en la cultura del ensayo.
De esta manera podrá percatarse de lo delicioso que es interpretar un instrumento cuyo sonido está definido en el oído que como el ciervo, está atento a la nota natural que lo rodea, de cualquier movimiento cerca de él, en su mundo.
El oído es un sentido extraordinario. Valorarlo es lo que el ser humano debe enfatizar en la práctica, el cultivar y el discernir, los sonidos que quiere el Creador que discernamos. Así que Juan nos deja el siguiente consejo, con respecto al oído: "Si alguno tiene oído, oiga" (Apocalipsis 13: 9) versión Reina Valera 1960.
El oído del ciervo no fue creado para detectar grandes ruidos, sino desde el más pequeño, hasta el más grande. De esta forma la psicología nos lleva al escenario de un mundo práctico y viviente donde se escucha al género humano, desde el más pequeño hasta el más grande.
Así es que se educa el oído del ciervo. Esto nos enfatiza a tener un oído que en ciertos momentos, debe captar el mensaje rápido, y en otros puede escuchar en grupo a sus semejantes. El apocalipsis no es un libro para confundir a la humanidad, ni al pequeño ni al grande, simplemente se ha creado el libro para educar, para instruir y para enseñar a aquellos que quieren cada día, tener un oído tan interesante donde las Escrituras en su sala de pedagogía global, enfatiza en el sonido de unidad natural.
Los invito a visitar este video que se titula: LA HONNER DEL GLOBO - C C J G, de una duración de: 3: 59, cuyo enlace es: https://www.youtube.com/watch?v=7j1XyZMXU4w&list=PLzD4cflvP5uMQLlQk9pv7WILxOlWawG5k&index=71
"El oído del niño se desarrollará como el del ciervo y el poeta"
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