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La palabra tribulación, no solamente aparece con un énfasis bastante resonante en el libro de Apocalipsis. Es muy clásica, podríamos decir por todos los escritores de la Biblia. Las personas que al leer la Biblia, y son seducidas por esta palabra, pierden el verdadero sentido de la vida cotidiana.
El filósofo San Pablo, le escribe en su carta a los romanos que estaban en diversos conflictos, y sólo porque no entendían los principios que estipula la Biblia, y que aún el mismo científico Jesús había enfatizado.
Diciéndoles que tendrían: tribulación. Pero estas tribulaciones se presentan cuando la vida del cristiano no está en armonía con su prójimo. Ni está el amor y la razón, en su corazón. Los cristianos que habían llegado a Roma, y que tenían escasos conocimientos, llegaron a fomentar problemas.
Porque sin conocimiento de la sabiduría de las Escrituras, pretendían conquistar a Roma, sin siquiera conocer los principios que se deben tener en cuenta para un mejoramiento de la vida en el hogar, la familia y así poder de buena manera y con buenas intenciones, compartir con mucho respeto y amor, por los demás.
Resulta que esta tribulación se presenta es por estas razones de que ellos no estaban preparados para llegar a una nación, donde el conocimiento y la sabiduría, son principios elementales. Y al fomentar la disidencia en la iglesia establecida en esta cultura, se produce una convulsión o tribulación.
Porque algunos sin tener conocimiento en teología y ciencia, quieren conquistar a los romanos, por la fuerza. Y entonces, se fomenta este problema que causa angustia, y que podría haber muertos en su época, por este desvío de los principios de la unidad y el amor.
El texto de hoy nos dice lo siguiente: "tribulación y angustia sobre todo ser humano que hace lo malo, el judío primeramente y también al griego;" (Romanos 2: 9) versión Reina Valera 1960.
Entonces podemos entender mejor ahora, sobre quiénes era que tendría que estar la tribulación, que registra Pablo, en su carta enviada a la iglesia en la cultura romana. E identifica a las personas que están causando ese trastorno, y ese conflicto y también a los griegos.
Seguramente a algunos griegos les gustaba la disputa, y esto era una vergüenza para el apóstol Pablo como encargado de ayudar a que la causa de la cultura cristiana, no sufriera esos vituperios. Estando en cierto lugar se me presentó un cristiano y me dijo que tenía muchos conflictos, y qué se podía hacer en este caso.
Mi primera pregunta para él, fue, después de haberlo escuchado, ¿sabes la doctrina que profesas? y su respuesta realmente, es que no. Entre lo que me cuenta sin saber de su doctrina, se puso a promoverla en el vecindario y en su pueblo más cercano.
Se prendió un conflicto con él, porque él no está preparado para esa obra que pretende de corazón, pero que no hay un conocimiento de sabiduría y educación, para compartir con esa región, que si necesita cultura, conocimiento, ciencia, pero este representante del cristianismo, lo que ha hecho es convertir su vida y su hogar, en una tribulación y angustia.
Por esta razón me consulta para ver que se podría hacer en este caso. Pero noto que en su conversación, el hombre escucha varias voces, es decir que no tiene bien claro si atiende lo que enseña su iglesia o lo que le proponen otros cristianos de su región, que noto que tampoco, tienen fundamento.
Exactamente esto es lo que está sucediendo con la iglesia cristiana en Roma, y Pablo, como filósofo y teólogo, escribe el texto que utilizamos para este blog desarrollando el versículo que la gente cree sin percatarse su trasfondo. Aquí lo que no hay es orden, cultura, sociabilidad, inteligencia y razón.
Los invito a visitar este video que se titula: EDUCACIÓN EN LA INDIA, de una duración de: 4: 16, cuyo enlace es: https://www.youtube.com/watch?v=4ydPXONtSuE
"Cuando la Biblia, transforma al estudiante, se termina el conflicto y comienza la educación y los buenos modales, hacia los demás"
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