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Los jóvenes son una bendición de Dios, para la familia, cuando se tiene en cuenta la educación y las artes. Es imposible que los jóvenes sin disciplina y sin conocimiento puedan dar el resultado esperado por los padres, y la sociedad.
Sin los valores, el joven será como el fuego del mundo, para la madera. Porque no tiene la resistencia para ese fuego que debe enfrentar cada día. Por esta razón, a los jóvenes hay que darles instrucción para que ellos vayan asimilando tanto el conocimiento como su experiencia, que cada día se necesita vivir
Los jóvenes en algunos casos, no han sido efectivos, debido a que no han tenido desde su niñez, esa propuesta que se necesita y que prepara para las labores que exige la actualidad. Si los padres no tienen conocimiento, sus hijos tendrán tropiezos en la vida cotidiana, para poder estar a la altura de aquellos que si recibieron instrucción.
A los muchachos se les debe intercalar el conocimiento con las labores cotidianas que lo van perfilando para su propio hogar. Cuando uno es instruido y entiende las materias como la administración de sus propios deberes tanto en la empresa, así como también en el área rural, ya ha dado un paso para el servicio a la humanidad.
Los israelitas tenían un grave problema con sus jóvenes, en el tiempo del profeta Isaías, porque los jóvenes que se decían estar preparados, no ejercían su misión para la cual habían sido llamados, y se convertían en un gran problema para la sociedad donde ejercían su profesión.
Los jóvenes hoy en día, se ven como un problema en las sociedades, porque se ha dejado que el joven elija su manera de vivir y su trabajo. Y este ha sido uno de los grandes problemas de la humanidad. Porque el muchacho necesita instrucción, más que el oro y la plata.
Un mundo de jóvenes educados, es lo que necesita esta sociedad que ha perdido el perfil de las obligaciones y deberes. Es necesario educar y enseñar al adolescente a que cumpla sus propios deberes. En el siglo pasado, el muchacho vivía según su propia conveniencia.
Tenemos un mundo que nos exige transparencia, cultura y salud, al cual los jóvenes, deben responder: heme aquí, envíame a mi, que he sido responsable con la instrucción que se me ha dado. Todo joven debe entender la magnitud de su propia responsabilidad. Nada menos es la de sus padres, que lo han engendrado para que sea una bendición para su familia y el mundo.
En este nuevo siglo triunfarán los hijos de los padres que han tenido en cuenta que sus hijos no pueden seguir sus propios caprichos. No se deben tener hijos para que sean nuestro propio reflejo, sino para que ellos sean libres, y libres en gran manera, con su propia cultura de responsabilidad.
Los invito a visitar este video que se titula: PARAÍSO ELEGIDO - C C J G, de una duración de: 3: 51, cuyo enlace es: https://www.youtube.com/watch?v=puaJTZSWuWA&list=RDpuaJTZSWuWA&start_radio=1
"Educa al niño y tendrás un adolescente fuerte y responsable"